martes, 18 de septiembre de 2012

GUARANIES: UN PUEBLO QUE CRECE.

En los últimos años el pueblo guaraní en Warnes esta sintiendo las consecuencias del progreso que está teniendo Bolivia, pues cada día que pasa las tierras que habitan son cada vez más pequeñas y sus necesidades aún no son cubiertas por las autoridades locales, departamentales o nacionales, según los mismos dirigentes. Por esta situación algunas familias que habitaban en comunidades, ahora viven en precarias casas a lo largo de la vía férrea en Warnes, lugar que han denominado barrio Rosario y que aún sin títulos de propiedad del lote que ocupan.
Hasta hace cinco años, se contabilizaban cinco comunidades guaraníes y cuatro mixtas, es decir que se mezclaban con otras personas llegadas de otros lugares y poblaciones. Ahora las mixtas han aumentado a nueve de acuerdo a datos proporcionados por los dirigentes debido a que se han descubierto a algunas familias en comunidades que no se habían dado a conocer.
Rodolfo Justiniano Vaca, capitán grande, dijo que ellos como tal están un poco olvidados por las autoridades y a pesar de que hay leyes que los protegen no están siendo tomados en cuenta como debería ser, pues son pueblos originarios que merecen ser atendidos en sus necesidades.
Entre las comunidades guaraníes en Warnes está Tapera, La Marina, El Carmen de Azuzaquí, Azuzaquí, El Futuro, Chané Justiniano y otras. Las más importantes y donde aún se conserva la lengua guaraní casi intacta es en Tapera y Marina, pues la mayoría de sus habitantes, sobre todo las personas mayores, lo hablan en forma permanente, a tal punto que algunos de ellos no entienden el castellano.
La comunidad más antigua es El Carmen de Azuzaquí, fundada en 1937, mientras que el asentamiento más reciente es el barrio Rosario de Warnes que fue fundado en 1998 cuando un grupo de 27 familias tomaron el lugar y construyeron precarias viviendas por los escasos recursos económicos con los que cuentan.
La mayoría de las mujeres del barrio se dedican en forma diaria a lavar ropa en la ciudad o prestar sus servicios de trabajadoras domésticas en algunas casas de la población, mientras que los varones realizan diferentes actividades “es difícil la vida que tenemos. Nuestras casas las hemos hecho a lo que hemos podido porque no contamos con recursos económicos”, dijo Rogelio Hacienda Suárez.
Entre los dirigentes de este pueblo se puede mencionar a Carmelo Justiniano que fue consejero departamental, Horacio Rivero que fungió como diputado nacional, Ramón Suárez y a Rodolfo Justiniano Vaca actual capitán grande.

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