Con juegos populares, comida típica y danzas, se celebró ayer la XV versión del Día de la Tradición de Warnes, en la que los warneños revivieron sus costumbres con una masiva participación de estudiantes de los colegios del nivel secundario, mientras que algunas autoridades municipales estuvieron sólo en parte de la caminata y en el acto central efectuado en la plaza de la Tradición y luego desaparecieron, dejando solo al presidente del Comité Cívico con todos los invitados que llegaron de todo el norte cruceño y de la capital departamental.La jornada comenzó a las 10:30 con una marcha desde el Comité Cívico hasta la plaza de la Tradición, en Santa Rosita, donde los estudiantes llamaron la atención porque durante el recorrido fueron bailando al compás de una tamborita y una banda de música que acompañaron durante todo el camino. En el trayecto, como ya es costumbre, se hizo una pascana en la quinta de la familia Arteaga, denominada La Molienda, donde los caminantes degustaron la sabrosa chicha camba para luego recorrer otros tres kilómetros.La marcha la encabezaban dirigentes de las fraternidades cruceñas y algunos warneños que para acortar distancia fueron jugando taba, mientras que una decena de niños se divertía aprendiendo este juego.Lo que llamó la atención a quienes cada año participan de la caminata fue la ausencia de las autoridades ediles desde el inicio de la caminata, pues el alcalde, Mario Cronenbold, se incorporó cuando estaba casi en la mitad del camino y lo mismo hizo el presidente del Concejo, Gilberto Justiniano. Ambos caminaron hasta la plaza para participar del acto central y luego desaparecieron para cumplir otras actividades.La participación de los estudiantes en la presentación de danzas le dio brillo a la actividad tradicional.
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