Pedro Félix Ribera, juez de
Portachuleo, fue designado por la
Corte de Distrito como juez suplente de Warnes hasta que el
administrador de justicia de Warnes, Ángel Sánchez Rivero, suspendido hace
siete meses, sea ratificado o definitivamente suspendido. Ribera aún no tiene
fijado los días que va a atender en Warnes debido a que tiene su asiento fijo
en Portachuelo que también debe atender.
El juzgador fue posesionado
como suplente de Sánchez el miércoles pasado y desde ese día comenzó a ver los
casos judiciales que se ventilan en Warnes “pero con más detalle” los verá
después de las vacaciones judiciales que comienzan el 7 y culminan el 31 de
este mes, por lo que tampoco ha fijado días de atención en esta población
norteña y lo hará recién cuando ingrese de vacaciones.
“Al tratarse solamente de una
suplencia, vamos a tratar de salir adelante haciendo que este juzgado de Warnes
funcione tratando de dar solución a todos los casos que sean puesto bajo mi
conocimiento. Ese es el reto que voy a asumir con responsabilidad y más que
todo honestidad”, señaló Ribera.
Los detenidos preventivamente
en las celdas del comando policial de Warnes recibieron la noticia con alegría,
pues ya podrán nuevamente reactivar sus procesos en busca de solución o
sentencia ya que antes debían viajar hasta Montero para realizar cualquier
diligencia “ahora tenemos más posibilidades de arreglar nuestra situación”,
señaló uno de los detenidos.
Hasta antes de la llegada de
Ribera, las audiencias cautelares de los casos denunciados se desarrollaban en
Montero y desde la suspensión de Rivero fueron varios los administradores de
justicia que atendieron los casos de Warnes y para asistir a las audiencias los
detenidos tenían que viajar a Montero y costear los gastos de su traslado, lo
que en algunas oportunidades ocasionó problemas a los mismos detenidos y
policías por la falta de recursos económicos.
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